La captación del agua cruda se realiza de dos pozos profundos (120 m) avalados por la CVC para este uso, que se emplean de forma intercalada. La capacidad de cada uno es de 60 litros por segundo.

Las aguas residuales domesticas son tratadas en la planta de tratamiento de aguas residuales PTAR, antes de ser vertidas al medio ambiente, cumpliendo con los estándares de calidad de vertimientos exigidos por la ley.

Conformado por los siguientes componentes: (a) Recolección, transporte y disposición final de los residuos sólidos. (b) Barrido y limpieza de vías y áreas públicas.